Agotamiento emocional
No te cansas de “ser fuerte”, lo que verdaderamente te agota es toda esa energía que inviertes al exigirte serlo.
No siempre estás bien dónde te encuentras, no puedes con todo, ni puedes hacerte cargo de todo. Ser humano no te resta fortaleza ni virtud. Tal vez no has reparado en la posibilidad de estar atravesando agotamiento emocional.
El agotamiento emocional es un estado que llega por la sobrecarga de esfuerzo. Esa sobrecarga se puede generar en cualquier área de nuestra vida. No llegamos a estar ni a sentirnos exhaustos de un momento a otro. Se trata de un proceso que se instala en nosotros lenta pero profundamente, hasta que hay un punto en que nos desplomamos. Es como si nuestra mente, cuerpo y corazón gritaran al unísono:
¡Basta! ¡No aguantamos más!
El agotamiento emocional se experimenta como un gran cansancio mental pero también se acompaña de una gran fatiga física. Invade una sensación de pesadez general y un pronunciado pensamiento de no poder seguir adelante. ¡Pero puedes!
Este cansancio emocional se origina por entregar más de lo que podemos de nosotros mismos. Nos sobre exigimos, en el trabajo, en el hogar, o en nuestras relaciones interpersonales.
Entramos en un desbalance y carecemos de tiempo para nosotros mismos. Nos esforzamos en “rendir” todo el tiempo, dejamos de lado nuestras necesidades y nos empeñamos en entrar a ese complicado molde de “Yo puedo aguantarlo todo”.
Puedes, desde luego identificar los primeros síntomas del agotamiento emocional:
• Cansancio físico: Sentir fatiga frecuente que se puede experimentar desde que despiertas hasta el resto del día.
• Insomnio: Pese al cansancio extremo, una persona con agotamiento tiene dificultad para dormir y experimentar un sueño reparador.
• Falta de motivación: No hay interés ni entusiasmo en las actividades cotidianas.
• Distanciamiento afectivo: Las emociones empiezan a ser cada vez más planas, como si no se experimentara ningún sentir.
• Falta de concertación: En las distintas actividades por realizar.
Para vencer el agotamiento emocional es crucial:
• Tiempo fuera: Busca y encuentra tiempo de calidad para ti. Produce momentos para relajarte y desconectarte de lo que te aqueja. Ponte en contacto contigo y con tus pasiones. Dedícate un día entero muy eventualmente.
• Descanso: Las personas que se exigen demasiado pasan mucho tiempo sin tomar vacaciones. Elige tomar unos días para tu descanso. Te lo debes, lo mereces y lo necesitas.
• Prioriza tus obligaciones diarias: Cada día dedica tiempo para tus compromisos y también para tu descanso. Incluye actividades que te resulten gratificantes.
Escribe acerca de cómo te sientes o platícalo con alguien cercano a ti. ¡No reprimas tu sentir!
• Desarrolla una actitud de bondad y comprensión hacia a ti: Respira, reconecta con lo que eres y con lo que no, ahonda en tus deseos y valídalos.
Y muy a menudo elige hablarte con la verdad, libera, oxigena, desintoxica, edifica, crece.
Descansa para seguir andando. A donde vayas te llevas contigo, elige viajar con el equipaje ligero, ligero y necesario.